Alejandro Matty Ortega/Irreverente Noticias
Hermosillo, Sonora (IN).- La llamada Nueva Escuela Mexicana se encuentra en un dilema entre la Política y la Pedagogía.
Ello con el contenido de los libros de textos del Plan de Estudios 2023-2024.
Este medio binacional Irreverente Noticias consignó que el lunes, un
Juzgado federal exigió a la SEP rediseñar los nuevos libros de primaria y secundaria a 28 días del regreso a clases en México.
Al respecto, el presidente Andrés Manuel López Obrador reiteró que no retirará los libros con el nuevo contenido
Este lunes 31 de julio, el Juzgado federal dio un plazo de 24 horas a la Secretaría de Educación Pública para el rediseño de los libros de texto gratuito.
La jueza Yadira Mena del Juzgado Tercero de Distrito en Materia Administrativa, expuso que “las autoridades responsables han sido omisas en dar cumplimiento cabal a la resolución referente a la suspensión definitiva dictada en autos”.
La juez argumentó que la medida "busca garantizar el contenido pedagógico acorde con el interés superior de la infancia, así como con los objetivos democráticos y de formación académica".
En este sentido, la SEP debe establecer consultas con especialistas en Educación, además de gobiernos estatales, cita.
La Comisión Nacional de los Libros de Texto Gratuito (Conaliteg), se negó a cumplir con los ordenamientos del Juzgado federal.
En caso de que nuevamente se venza el plazo establecido, la jueza evaluará si presenta imputaciones ante la Fiscalía General de la República (FGR).
¿Política o Pedagogía?
No son pocos los docentes que consideran que la Nueva Escuela Mexicana no solamente elimina a las Matemáticas de los nuevos libros de texto, "sino que todo eso se incrusta en un modelo que no es pedagógico sino político".
La maestra Fernanda Alicia Aragón Romero, analiza el tema que expone en redes sociales compartido por más de 10 mil personas al menos en Facebook.
La docente precida que "Ya los tengo, ya los revisé... el análisis tiene mucho de verdad".
Destaca que "Mi hipótesis es que los libros se empezaron a elaborar desde el año pasado, cuando no aparecían las Matemáticas en los programas sintéticos o estaban muy desdibujadas .
Agrega que "A partir de enero, en el marco del taller intensivo, aparecieron insertos contenidos y pda en el campo Saberes y Pensamiento Científico pero los libros ya estaban en maquilación".
Indica además que "Ahora, se corrobora que los libros no serán más que un leve recurso de apoyo, no llevan la secuencia del programa (lo que era de esperarse si la secuencia la elaboró cada colectivo en el programa analítico) .
Expresa que "El libro sólo presenta cápsulas de proyectos a manera de ideas detonadoras para que el docente elabore los propios y en algun caso utilice alguna de estas recetas".
La maestra indica también que "Finalmente, le tocará al docente diseñar o adaptar proyectos y hacer explícitas las Matemáticas en ellos, porque sabemos que éstas siempre están ahí, en cada instante de la vida cotidiana".
En su análisis, la docente supervisora de Educación Especial copia el texto de Raúl Rojas González, Premio Nacional de Ciencias y Artes 2015:
"Los libros de texto gratuitos para las escuelas primarias en México existen desde principios de los años sesenta.
En el Archivo Histórico de la Conalite (Comisión Nacional de los Libros de Texto Gratuitos) se pueden consultar las diversas ediciones que ha habido desde la generación 1960.
Todos los hemos tenido en las manos y era siempre un momento especial cuando se nos entregaban al principio del año escolar.
En los últimos meses se ha criticado la desaparición tanto del libro de matemáticas como de español para el primer año de primaria en la edición 2023 de los libros de texto.
Las protestas de especialistas y padres de familia no han tenido mayor resonancia y aparentemente la SEP impondrá su nuevo modelo educativo a rajatabla, sin haber tratado de alcanzar antes un consenso con las diversas entidades federativas ni con los actores involucrados en la educación de los niños.
El caso del libro de matemáticas es lamentable por muchas razones.
Lo que se pierde al desaparecer el libro de matemáticas del primer grado.
Una tradición de 63 años, a lo largo de los cuales la importancia asignada a la materia fue creciendo paulatinamente.
Ahora, con los nuevos libros de texto para el primer grado, elaborados por la Dirección de Materiales Educativos de la SEP, no hay ninguno asignado a las matemáticas.
Ahora habrá dos libros con material educativo (“Nuestros Saberes” y “Múltiples Lenguajes”) y tres libros sobre proyectos que el maestro puede organizar en el aula, en la escuela o en la comunidad.
Los dos libros de material educativo consisten en cápsulas de dos o tres páginas cada una, sin ningún orden discernible.
Se pasa de las abejas al código Braille, a ejemplos de algunas figuras geométricas, a cuestiones de igualdad social, etc.
Es una desordenada Wikipedia de cápsulas didácticas.
La idea de la “Nueva Escuela Mexicana” es que el maestro ya no enseñe materias específicas, sino que trabaje en proyectos con los alumnos.
El maestro selecciona de las cápsulas aquellas que se necesitan para el proyecto, por ejemplo, la cápsula 20, la 45 y la 53, y así los niños supuestamente aprenderán Español y Matemáticas.
De pasadita, mientras resuelven problemas sociales.
La realidad es que en el libro “Nuestros Saberes” cuando mucho 11 páginas están dedicadas a algo que se pudiera llamar Matemáticas, además de que hay muchos errores conceptuales.
Es inútil buscar en sus páginas un enfoque sistemático de los diversos temas que antes cubría el libro de Matemáticas.
No hay una sola página con espacio para resolver ejercicios numéricos o geométricos.
No se necesita ser experto para saber que operar con los números y resolver problemas matemáticos no es algo que se aprenda en una mañana y ya.
Hay que ejercitar y ejercitar (y ejercitar de nuevo) lo aprendido, con diferentes números y planteamientos hasta que se logra la destreza necesaria para resolver cualquiera de esos problemas de manera segura.
No hay materias, en los nuevos libros no encontramos más que fragmentos de la materia Matemáticas, ésta desaparece bajo un cúmulo de “saberes” destinados a ser integrados en los proyectos “sociocríticos” propuestos en los tres libros de proyectos".
Lo fatídico de la “Nueva Escuela Mexicana” no es solamente que prácticamente elimina a las Matemáticas de los nuevos libros de texto, sino que todo eso se incrusta en un modelo que no es pedagógico sino político.
De acuerdo con los documentos de la SEP, lo que se tendrá ahora en el salón de clases es una “ecología de saberes”, en donde el método científico no será preponderante.
Se le contrapondrán “saberes” alternativos, “contrahegemónicos”, por ejemplo, los saberes de los pueblos originarios.
Esas “epistemologías del Sur”, léase de los pueblos oprimidos, van a alfabetizar al pueblo y a concientizarlo al mismo tiempo.
Son resabios de la “pedagogía del oprimido” de Paulo Freyre, ahora aplicado al nivel de todo un país como México.
El problema de la “Nueva Escuela Mexicana” es que va a dañar sobre todo a las clases populares.
La clase media ya hace tiempo que huyó hacia las escuelas privadas y ahí los nuevos libros de la SEP acabarán en el bote de la basura.
Para las Matemáticas las escuelas particulares van a usar cualquiera de los libros de muy buena calidad que venden editoriales mexicanas y extranjeras.
La brecha de aprovechamiento escolar entre las escuelas públicas y las privadas seguirá aumentando.
De hecho, en México se podría decir que tenemos un apartheid educativo, que sólo se profundizará ahora que la SEP decidió que los libros de texto gratuito fueran guillotinados.
¿Y le importa eso a los responsables de los materiales educativos?
La idea rectora de la “Nueva Escuela Mexicana” es, como dijimos arriba, la “ecología de saberes”, que no incluye necesariamente materias concretas, como el Español y las Matemáticas, sino consiste en estimular una aproximación intuitiva a la realidad a través de los proyectos sociocríticos.
Es una ideología en la que no cabe el aspiracionismo ni el método científico.
Evaluaciones de aprovechamiento escolar o de los maestros se califican de punitivas.
Diferencias entre los estudiantes tampoco deben ser.
Una historia de los nuevos libros de Civismo, ya utilizados en 2022, ilustra muy bien las cosas: en una carrera de Educación Física entre cinco estudiantes, el que lleva la delantera se detiene para que lo alcance el que va en segundo lugar.
Los dos esperan a los que van en tercero, cuarto y quinto lugar.
Ya todos juntos, corren hacia la meta y al llegar se abrazan.
En la “Nueva Escuela Mexicana” hay que nivelar el rendimiento escolar hacia abajo para que no haya disparidades, para establecer así una igualdad en la ignorancia.
Recordemos que la atención a las aptitudes sobresalientes también es inclusión y que el aprendizaje colaborativo busca la mejora entre pares no la condescendecia", culmina el análisis de los docentes.