Sonriente en todo momento, recomienda a quienes padecen alguna depresión o pasan por un mal estado de ánimo, tomar en cuenta “que están completos
Por: Yola Jiménez/Enviada especial
Monterrey, N.L.- Ni las desgracias, los desánimos e incluso la pérdida de una de sus piernas, lo vence. Su lucha continúa en favor de quienes más le necesitas: los niños con capacidades distintas y ahora también, quienes como él, requieren de una prótesis.
Así, bajo el lema: “Aunque te la rajen, NO TE RAJES”, el joven regiomontano Moisés Neftalí García Salinas emprende una nueva tarea que él mismo se impuso, primero, recaudar fondos para poder adquirir la prótesis que necesita para avanzar en su misión, aunado a ello, crear una fundación para apoyar a la gente que no sólo requiere de un miembro artificial, sino también dar rehabilitación, apoyo psicológico y emocional. “En México diariamente hay siete amputaciones, de ellas sólo una persona obtiene una prótesis, ya sea comprada o donada, pero es una nada más”.
Padre de familia, esposo, emprendedor y siempre viendo la forma de ayudar a otros, García Salinas no sólo es considerado por quienes le conocen como un guerrero, sino también como un héroe ya que, como lo relata, fue por salvar a un amigo de ser atropellado por un pesado camión, que él perdió no sólo la pierna, sino la vida por unos momentos.
“Los médicos queme atendieron me daban sólo el 10 por ciento de posibilidades de sobrevivir y durante el tiempo que estuve hospitalizado, literalmente me morí e incluso desde algún lugar yo veía los esfuerzos que hacían por salvarme, veía a mi esposa llorando, a los doctores luchando durante mi operación y finalmente después de haber estado en coma, tras 21 días de fui dado de alta y aquí estoy”, relata “Talí” como le gusta ser llamado.
Recuerda que “el 4 de agosto del 2023 venía por la carretera nacional junto con otro compañero. Nos orillamos y él se baja pero el carro que venía atrás de nosotros se pega mucho y golpea con el espejo a mi amigo en el hombro, esto le hace caer justo cuando venía un camión, le hacemos señas y no nos ve entonces me lancé a agarrar a mi compañero, lo agarro y lo aviento, pero al hacer esto es cuando el camión me impacta, me pega en el brazo y me deja fractura expuesta a la vez que perdí un pedazo de piel”.
García Salinas aclara que nada de esto recuerda, sino que todo está basado en lo que le han contado testigos del hecho, a la vez que prosigue: “El principal impacto fue en la pelvis y en la pierna y empiezo a desangrarme. Llegaron mi esposa y mi hijo y al ver la gravedad no esperan la ambulancia, sino que ellos me trasladan a un hospital en donde me detectaron hemorragia interna y no me podían mover, así estuve seis días.
“Cuando ya me estaban estabilizando, prosigue, se dan cuenta que tengo una infección muy grande y más de 40 grados de temperatura. La pierna se estaba gangrenando, no tenía pulso y había que actuar rápido para salvar mi vida y se decide la amputación de mi pierna derecha. De ahí todo parece que va mejorando, después de varios días me despiertan ya que me habían inducido el coma, se dan cuenta de que mis riñones están funcionando, que no tenga daño neurológico y empiezo a mejorar”, comenta.
Siempre de buen ánimo, Neftalí García recuerda pasajes de momentos vivido en el hospital: “Minutos antes del accidente y hasta once días después, yo no recuerdo nada de lo que pasó, lo que sí recuerdo es que viví un viaje, si así se le puede llamar, en donde yo me encontraba en una mogue y me querían hacer una autopsia, yo sentía que estaba vivo y me empezaba a mover, golpeaba la gaveta y decía que no estaba muerto, que no me iba a morir.
“Mientras, en la realidad, los doctores decían: se está muriendo mucho, tenemos que meterle otra sedación. Se sigue moviendo, está peleando, no quiere morir. Entonces tenían que sedarme de nuevo porque era tanta la gravedad que si yo me movía, estaba en riesgo, por lo que tuvieron qué ponerme cuatro sedaciones, que era lo más que se podía poner.
“De repente en mi viaje, yo me escapo de la morgue, mi esposa me encuentra y me abraza. En otra parte, vuelvo a verme en el hospital y me doy cuenta que tengo un problema en el corazón, me operaban pero el doctor les decía que no había nada qué hacer, yo fallecía. Al abrir lo ojos, nuevamente estaba en el hospital, entonces no entendía lo que pasaba. Entonces yo les decía a los doctores en dónde estaba el problema, me hacían caso y me operaban y me salvaban la vida. Cuando me empezaban a despertar, en la vida real, también me estaban despertando del coma inducido”.
Ante este recuerdo, García Salinas, director de la escuela Brain Academy, dedicada a la atención de niños con capacidades distintas como autismo y Síndrome de Down, ahora también se da a la tarea de buscar opciones de para quienes sufren alguna amputación.
Sonriente en todo momento, recomienda a quienes padecen alguna depresión o pasan por un mal estado de ánimo, tomar en cuenta “que están completos, no les falta ningún miembro, por lo que deben de considerar esto y no dejarse vencer por un mal episodio, por no tener pareja, por alguna ruptura amorosa.
En constante lucha por alcanzar sus objetivos, Moisés Neftalí García Salinas, pide a quienes deseen apoyarle tanto en la adquisición de su prótesis como para lograr la creación de una fundación que incluya un hospital de atención posterior a alguna amputación, que lo hagan a través de la cuenta Banamex 7017 7197 821.