Ante las inundaciones que sufriera Morelos el pasado fin de semana por las torrenciales lluvias registradas, el gobernador de la entidad, Cuauhtémoc Blanco, se recreaba.
Por: Ernesto Madrid
Reconoció que se vio con el empresario Arturo Elías Ayub y el exfutbolista Jorge Campos, para jugar golf.
“Yo no le veo nada de malo, tengo una muy buena relación con Elías, me vine a desayunar con él. Soy un ser humano, tengo derecho a jugar golf, pádel, futbol… Lamentablemente así es la política”, expresó con cinismo el mandatario morelense.
La realidad es que mientras la población sorteaba las lluvias en donde al menos 500 viviendas resultaron afectadas, a distintas escalas, por el desbordamiento de barrancas, de acuerdo al ayuntamiento de Yautepec, el mandatario se comportó inmune.
En tanto la barranca Apanquetzalco se desbordó en varios puntos en el municipio de Yautepec lo que provocó inundaciones, en algunas colonias como Oaxtepec, Santa Rosa, Corral Grande, El Capulín, Apanquetzalco, 13 de Septiembre, Ignacio Zaragoza, Fraccionamiento Viyautepec segunda sección y el Barrio de Rancho Nuevo en Puente Batea.
El agua alcanzó hasta más de un metro de altura. “Y después del niños ahogado”, el exfutbolista fue cuestionado por cómo se atendieron los incidentes ocasionados por las inundaciones del fin de semana y respondió que “estamos recaudando todas las afectaciones que hay, hay un fondo para apoyar a la gente que más necesita”.
Blanco Bravo se justificó al señalar que su administración proporcionó despensas y colchones a los pobladores de Tlacayapan.
