Un programa de acción que promueva el desarrollo rural y la erradicación de la pobreza extrema y el hambre para que la migración sea una opción y no una necesidad, es el principal objetivo de la reunión de Alto Nivel sobre migración, desarrollo y seguridad alimentaria en Mesoamérica que se lleva a cabo en Ciudad de México, del 2 al 3 de julio.
Más de 100 delegados de El Salvador, Guatemala, Honduras y México participan en este encuentro de dos días para debatir una propuesta conjunta a los desafíos de la migración en Mesoamérica.
“La migración debe ser un acto voluntario, y no un acto forzado. Pobreza, hambre, cambio climático, inseguridad —es decir, subdesarrollo severo—crean una tormenta perfecta en la que miles de personas solo ven una vía de salida: emigrar. La solución de fondo a la migración obligada, es el desarrollo”, dijo el director general de la FAO.
El director general de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), José Graziano da Silva, saludó el compromiso suscrito el pasado 1 de diciembre por los jefes de Estado de El Salvador, Guatemala, Honduras y México para impulsar un plan de desarrollo integral para abatir la migración irregular.
Graziano da Silva comprometió el apoyo de la FAO a los gobiernos de dichos países para promover el desarrollo de los territorios rurales que son centros de origen de migrantes.
Víctor Villalobos Arámbula, secretario de Agricultura y Desarrollo Rural de México (SADER), expresó que en México estamos convencidos que atender las causas que originan el fenómeno migratorio es una condición para que esta sea opcional, no forzada.
“Esa es la vía mexicana, como la ha denominado el presidente López Obrador, y estamos trabajando para demostrar al mundo entero, que se puede prevenir y controlar este fenómeno si hay desarrollo, empleo y bienestar para todos en los lugares de origen”, afirmó el secretario de Agricultura y Desarrollo Rural, Víctor Villalobos Arámbula.
Informó que los gobiernos de México, El Salvador, Guatemala y Honduras hemos decidido construir un “Plan de desarrollo integral” que permita atender el fenómeno migratorio con acciones que van a generar desarrollo y oportunidades a nivel local.
El subsecretario para América Latina y el Caribe, Maximiliano Reyes, en nombre del presidente Andrés Manuel López Obrador, agradeció a la Comisión Económica para América Latina y el Caribe y al Sistema de la Integración Centroamericana, por su apoyo decidido y comprometido con el desarrollo de la región. Asimismo, señaló que, en esta reunión, la FAO pretende lograr una estrategia que conlleva un diagnóstico focalizado para cada territorio, con políticas e instrumentos específicos que promuevan alternativas a la migración. El subsecretario enfatizó que ningún país puede enfrentar este desafío compartido por sí mismo, lo que implica una solución regional.
Adicionalmente, subrayó que “estamos convencidos de que la voluntad y el esfuerzo conjunto nos permitirán avanzar por el camino correcto y vamos a demostrarle al mundo que la migración puede ser una opción y, de ninguna manera, es una amenaza”.
En la inauguración del evento estuvieron presentes Vinicio Cerezo, Sistema de Integración Centroamericana; Jorge Alberto Benítez Portillo, viceministro de Agricultura y Ganadería de Honduras; Nineth Escobar Cabrera, viceministra Administrativa Financiera del Ministerio de Desarrollo Social del Ministerio de Guatemala; y Carlos Enrique Cáceres Chávez, embajador de El Salvador en México.
El programa de acción considerará, entre otros aspectos, la resiliencia climática rural y la adaptación de la agricultura al cambio climático; la creación de empleo agrícola y no agrícola; la generación de ingresos y la promoción de la agricultura familiar, y estará alineado con la Agenda 2030 de Desarrollo Sostenible y el Pacto Mundial sobre Migración, adoptado por la Asamblea de Naciones Unidas en diciembre de 2018.