Ingenieros chinos promueven la investigación y el desarrollo de motores que se utilizarán en la próxima sonda lunar del país y en su primera misión a Marte, reveló el jefe del proyecto.
Liu Zhirang, presidente de la Academia de Tecnología de Propulsión Aeroespacial en Xian, provincia de Shaanxi, indicó que se contará con más de 70 motores en 6 series para el Chang E 5.
Liu declaró al Diario de China en una entrevista exclusiva que el trabajo avanza bien, aunque algunos de los motores resultan novedosos para los especialistas.
Estas partes se usarán para llevar un parte esencial del Chang E 5 a la órbita lunar, algo que otras sondas chinas no han podido hacer, agregó.
"Nuestras naves anteriores permanecerán en la luna durante toda su vida útil, por lo que la función de sus motores es simple: un descenso controlado y lento".
En tanto, el Chang E 5 se quedará en la superficie del satélite natural por un tiempo y luego regresará a la órbita lunar, por ello motores capaces de ascender son un gran desafío para nosotros ", admitió.
El científico apuntó que el polvo lunar y la notoria diferencia de temperatura entre el día y la noche probablemente impondrán dificultades a los motores.
"Necesitamos tomar en cuenta estos factores y usar medidas específicas, incluida la adopción de mejores herramientas de control de la temperatura y protección contra el polvo. El primero será clave para determinar si funcionan bien", aclaró.
Además de los motores ascendentes, aquellos en otras partes de la nave probarán la habilidad de los ingenieros ya que deben ser fuertes pero ligeros y pequeños lo más posible. Además, deben resistir el calor y el frío extremo, acotó.
China planea echar mano del cohete portador Gran Marcha 5 de carga pesada para enviar el Chang E 5 a la Luna a fines de este año y luego regresarla con muestras a la Tierra.
La sonda de 8,2 toneladas métricas tiene 4 componentes: un orbitador, un módulo de aterrizaje, un ascendente y un módulo de reingreso. Luego de alcanzar la órbita lunar, se separará en 2 partes: el orbitador y el módulo de reingreso en órbita; y el módulo de aterrizaje y el ascendente en la superficie lunar para la recolección de rocas y suelo. Más tarde, los motores del ascendente lo llevarán a la órbita lunar para acoplarse con el módulo de reingreso. Según las autoridades espaciales chinas, ahí se hará la transferencia de muestras con destino al planeta.
De resultar en un éxito, China se convertirá en la tercera nación del mundo en regresar con muestras lunares después de Estados Unidos y Rusia.
China ha anunciado que planea lanzar su primera nave a Marte en 2020.
Liu explicó que sus motores deben ser más pequeños y livianos que los de las incursiones lunares, ya que la atmósfera marciana tiene efectos aerodinámicos distintos en la sonda.
Además, requieren de una mayor capacidad de automatización porque es probable que la distancia entre la Tierra y Marte retrase las señales de control terrestre, añadió.