EL FORO QUE SE CELEBRARÁ ESTE MES EN BEIJING CONSOLIDARÁ LA RELACIÓN ENTRE DOS SOCIOS Y AMIGOS QUE COMPARTEN SIMILARES IDEALES
Por WU SIKE
China Hoy
El Foro de Cooperación China-África se celebrará en el dorado otoño de Beijing. En medio de trascendentales cambios en la situación internacional, los dirigentes de China y África se reunirán en la capital china para discutir la cooperación bilateral, planear el programa de cooperación China-África de la nueva era, emitir medidas para guiar el desarrollo de ambas partes y promover intercambios en diversos terrenos. Sobre la base del principio de deliberación en común, de construcción conjunta y de codisfrute, el tema principal del foro se combinará con la construcción conjunta de la Franja y la Ruta, la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible de la ONU y la Agenda 2063 de la Unión Africana, a fin de elaborar un nuevo plan de cooperación y ganar-ganar, lanzar nuevas medidas para una cooperación integral sino-africana y abrir nuevas perspectivas de desarrollo común. La celebración del foro es un importante acontecimiento para la diplomacia china en el presente año y será también un hito en la relación sino-africana. Como un experimentado diplomático que lleva diez años viviendo en África, me siento orgulloso de ver los logros obtenidos.
1. Una larga amistad, unión y cooperación. China y África son amigos íntimos y buenos hermanos. Más de seis décadas después de la fundación de la República Popular China, los pueblos de ambas partes están juntos contra viento y marea, y la amistad se consolida cada vez más con el paso del tiempo.
Después de que el pueblo chino se levantara y pusiera de pie en las décadas de 1950 y 1960, China apoyó a los países africanos en su lucha de liberación e independencia. Se les proporcionó apoyo económico, aunque nuestro país todavía tenía una economía atrasada. Asimismo, no olvidamos que en la lucha por recuperar el escaño de la República Popular China en la ONU, los hermanos africanos nos dieron un valioso apoyo, lo que sentó una base firme para la amistad bilateral.
En octubre de 2000 tuvo lugar la primera reunión ministerial del Foro de Cooperación China-África en Beijing, el cual ha llegado a ser un importante canal para el diálogo colectivo y la profundización de la cooperación, así como la mejor plataforma del mundo en cuanto a la cooperación Sur-Sur. En estos 18 años, la cooperación sustancial entre China y África ha obtenido plausibles resultados. El volumen comercial en 2017 se incrementó unas 17 veces en comparación con el año 2000, mientras que la inversión china hacia el continente africano se ha multiplicado unas cien veces.
2. El desarrollo de la relación bilateral bajo una nueva época y una nueva situación. Después de asumir el cargo de presidente en 2013, Xi Jinping eligió a África como su primer destino en visita oficial. Tras ser reelecto este año, el primer viaje de Xi fue a cuatro países africanos, en donde enfatizó que el desarrollo de la cooperación integral con las naciones africanas es una opción estratégica para China.
En el Foro de Cooperación China-África llevado a cabo en Johannesburgo (Sudáfrica) en diciembre de 2015, el presidente Xi Jinping propuso “cinco pilares”, una nueva definición de la relación sino-africana y “diez planes de cooperación” para los próximos tres años, a fin de resolver la obsoleta infraestructura, la carencia de personal de talento y la falta de capital, tres cuellos de botella que impiden el desarrollo, y acelerar la industrialización y la modernización agrícola en el continente africano.
Gracias al esfuerzo de ambas partes, el nivel de la relación entre China y África se ha elevado al de Asociación Estratégica Integral. En el terreno político, las visitas de alto nivel se han incrementado. En los últimos cinco años, el presidente Xi ha realizado cuatro visitas a África, y más de 60 líderes y dirigentes de los países africanos han visitado China o participado en reuniones internacionales. En el terreno económico, se han integrado profundamente los intereses de ambas partes. Durante nueve años consecutivos China se ha mantenido como el primer socio comercial de África. El comercio bilateral en 2017 ascendió a 170.000 millones de dólares, las inversiones chinas han sobrepasado los 100.000 millones de dólares y más de 3100 empresas chinas se han establecido en África. Proyectos como los de los trenes Adís Abeba-Yibuti y Mombasa-Nairobi, entre otros, se han puesto ya en marcha y vienen ampliando la producción, el empleo, la industrialización y la modernización.
También te puede interesar: LA NECESIDAD DE UN ESQUEMA DE COOPERACIÓN DESCOLONIZADA
En el terreno cultural, los intercambios se desarrollan vigorosamente. África es la cuna de la civilización mundial y la diversidad cultural se refleja plenamente aquí. Anualmente China celebra en África más de 30 eventos culturales y pone en práctica más de 50 proyectos de cooperación humanitaria. Asimismo, los intercambios directos entre think tanks, colegios de enseñanza superior, medios de comunicación y grupos privados se desarrollan con normalidad.
La cooperación en la paz y la seguridad también se ha fortalecido y se ha vuelto un punto llamativo en la relación bilateral. De los cinco miembros permanentes del Consejo de Seguridad de la ONU, China es el que ha asignado una mayor cantidad de soldados a África para salvaguardar la paz. China emprende acciones contra la piratería y ha enviado 29 escoltas al mar de Somalia, además de participar en la mediación de temas candentes, como el caso de Sudán del Sur.
3. La Iniciativa de la Franja y la Ruta. La propuesta china ha tenido un fuerte eco entre los países africanos, lo que demuestra su profundo interés y su deseo de participar en ella. La parte china también espera que la construcción de la Franja y la Ruta impulse aún más la cooperación de beneficio mutuo entre ella y África, y lleve la relación de Asociación Estratégica Integral a una nueva fase.
A cinco años desde que fuera planteada por primera vez, la Iniciativa de la Franja y la Ruta ha dejado de ser un concepto y una perspectiva y ha pasado a ser una acción y una realidad. Entre los 86 países y organizaciones internacionales con los que China ha suscrito documentos sobre su construcción conjunta, figuran muchas naciones africanas.
África fue históricamente una parte indispensable de la antigua Ruta de la Seda. El marino y explorador chino Zheng He viajó con su flota por los mares del oeste durante el siglo XV, lo que dejó una hermosa huella en el continente africano. Además, en África se concentra la mayor cantidad de países en desarrollo y es también la región con mayor potencial del mundo. La Franja y la Ruta no solo se refiere a la construcción de infraestructura, sino que también busca abrir un camino de innovaciones que conduzca al futuro y ayude al continente a convertirse en una fuerza importante dentro de la configuración mundial.
En el aspecto de desarrollo común, la combinación entre la Iniciativa de la Franja y la Ruta, la Agenda 2063 de la Unión Africana y la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible de la ONU ha brindado una fuerte energía al desarrollo de África y ha incentivado de forma sustancial la industrialización del continente.
En los últimos años, la parte china viene cooperando con los países africanos en importantes asuntos como la liberación de la pobreza, la seguridad de los cereales, la innovación, la construcción de infraestructura, la industrialización, entre otros, con el propósito de ayudarles a mejorar su estructura económica. Diez años antes, el 80 % de las importaciones chinas desde África eran materia prima y petróleo, pero hoy dicho porcentaje ha descendido al 53 %, lo cual evidencia que cada vez más empresas extranjeras ven con buenos ojos las perspectivas africanas y su mano de obra, y han trasladado sus operaciones de manufactura a dicha región.
4. El multilateralismo, la globalización económica, la informatización social y la diversificación cultural promueven aún más la interdependencia entre los países. De cara a los desafíos que la humanidad enfrenta –como economías sin la fuerza motriz necesaria, la ampliación de la brecha entre ricos y pobres, los frecuentes conflictos regionales, el desenfrenado terrorismo, entre otros–, ningún país puede preocuparse solo de sí mismo y no atender lo que ocurre con los demás. Se necesita mancomunar esfuerzos para vencer las dificultades. Por ello, la propuesta del presidente Xi Jinping sobre el establecimiento de un nuevo tipo de relaciones internacionales y de una comunidad de destino de la humanidad ha sido incluida en los documentos de la ONU. El impulso de la solidaridad sino-africana y la realización de intereses conjuntos son grandes elementos para la construcción de la comunidad de destino de la humanidad.
Los pueblos de China y África se apoyan mutuamente, han venido compartiendo la misma suerte durante largo tiempo y han ido encontrando un camino de cooperación que se corresponde con la tendencia de la historia y la realidad de ambas partes. China y África son socios sinceros en el camino de desarrollo y persisten en la cooperación y el beneficio común. Como países en desarrollo, tienen los mismos intereses e ideales en los asuntos internacionales.
A fines de julio, al finalizar su visita de Estado a cuatro países africanos, el presidente Xi Jinping expresó que China y África forman parte de una comunidad de destino común y comparten una comunidad de intereses caracterizada por una cooperación de beneficio mutuo. China estará siempre al lado de los países africanos en cuanto a los temas de desarrollo, sin importar cómo cambie el mundo, y será siempre un socio sincero y confiable.