EL PRIVILEGIO DE SERVIR
Una de las cosas que han ayudado a la expansión de conocidos grupos empresariales y/o económicos en el mercado, ha sido que estos invirtieron grandes sumas de recursos económicos en sus departamentos de servicio al cliente. Estos departamentos, se han constituido en la clave para el desarrollo y éxito de empresas de servicio.
Qué los motiva? Por qué lo hicieron?, pues se dieron cuenta que no bastaba con presentar un buen producto o servicio, sino que era necesario identificar y satisfacer las necesidades de sus clientes reales y potenciales.
Esta filosofía del servicio, que la vemos en el mundo de hoy, viene plasmada en el manual del ser humano, nos la enseña desde sus principios como parte de la voluntad del Creador para la humanidad.
Este manual nos enseña que el Creador le da al hombre un propósito: SERVIR. En el principio de este manual muestra que no había hombre que labrase la tierra. Era necesario que alguien hiciera esa tarea, por esta razón luego de su creación lo puso en el Edén para que labrase y guardase la tierra. Es decir, lo puso a su servicio.
¿Qué es servir?
“Es estar empleado en la ejecución de una cosa, por mandato de otro. Es estar al servicio de otro”.
¿Por qué debemos servir?
1. Porque es un mandato. En un pasaje de la Biblia nos muestra que uno de los mandatos de Dios dado a su pueblo redimido de Egipto fue que éste debía servirlo.
2. Jesucristo nos dio el ejemplo (Marcos 10:45). La vida y ministerio del Señor Jesucristo estuvo impregnada de servicio.
¿Cómo debemos servir?
En forma consciente.
Debemos tener plena conciencia y certidumbre, de que nuestro servicio sea un acto de reverencia al Creador, No servimos a los hombres sino a Él.
Con alegría
El servicio que efectuemos debe causar gozo en nuestro corazón. No debe ser motivo de carga u obligación.
Con humildad
No debe ser motivo de vanagloria.
Fervientes
Nuestro servicio debe estar acompañado de todo nuestro ánimo, debe reflejar nuestra comunión con Dios.
En el Espíritu
La Biblia enseña que estamos bajo el régimen del Espíritu y no de la carne. Nuestro servicio debe ser motivado, guiado, ungido por el Espíritu de Dios.
Somos personas redimidas por la honra de Jesús y por lo tanto tenemos la oportunidad de demostrar nuestra gratitud a Él.
Asi que nuestro propósito debemos hacerlo bajo las anteriores condiciones y valores. Cuando descubrimos esto, realmente prosperamos en todo ámbito, el personal, familiar, social, laboral... En fin, nos cambia la vida.
Les recomiendo una película del Dr. Wayne Dyer que se llama "The Shift", El atardecer de la vida, su traducción en español.
Muchas gracias de antemano por sus comentarios, ellos reflejan su corazón.
https://youtu.be/bePts02nIY8
Ing. Carlos Roberto Matty Ortega, Consultor empresarial, turístico y cultural. Director de Esfera Noticias Sonora, Esto es Sonora, Revista Digital