El mal manejo de la pandemia por parte del gobierno federal y, sobre todo, la falta de apoyos económicos gubernamentales a familias y empresas, que en otros países sí se otorgaron, incluso en los de menor desarrollo que el nuestro ha dejado a las y los mexicanos sin lograr recuperar el nivel de vida que tenía hasta 2018.
Ernesto Madrid
A lo anterior se suma que el crecimiento en México tiende a ser más bajo que el del mundo y el estancamiento reciente es extraordinario y nuestro país crece menos que el del promedio de los países desarrollados y en desarrollo que, considerando seis décadas, en una muestra de 104 países, México se ubicó en el lugar 28 de dinamismo entre 1960 y 1980 y, si tomamos el periodo completo 1960 a 2023, el país se ubica en el número 65.
Lo anterior es resultado de una evaluación internacional realizada por los especialistas de Citibanamex denominado ‘La lenta recuperación del PIB por persona de México y la trampa del ingreso medio: una evaluación internacional’ que se refiere al PIB per capita o el PIB de cada persona, que no es otra cosa que la cantidad de dinero que le correspondería a cada habitante del país si se repartiera a todos por igual con respecto al PIB generado en un año por el país.
Lo controvertido del caso, es que en esta admiración obradorista, se revela que las prácticas de antes en temas de corrupción siguen enriqueciendo al minúsculo sector político que nos gobierna, con Morena a la cabeza y muchos actores que provienen de otros partidos y que se han ceñido a la ‘cuarta transformación’ siguen alimentando su riqueza.
De acuerdo con el estudio, “a diferencia de lo ocurrido en la mayoría de las economías, los mexicanos no hemos recuperado el nivel de vida que teníamos en 2018 y el crecimiento promedio anual del PIB real por persona entre 2018-23, el de México se ubica hoy marginalmente por debajo del 2018 (-0.3%), lo que contrasta con los avances positivos de regiones y países tanto desarrollados como en desarrollo”.
Aunado a lo anterior destaca que, aunque el crecimiento en México tiende a ser más bajo que el del mundo, el estancamiento reciente es extraordinario e incluso el crecimiento del país ha sido bajo en las últimas décadas y México sigue creciendo menos que el del promedio de los países desarrollados y en desarrollo.
Citibanamex detalla que, en el último siglo, México ha progresado mucho en términos absolutos, pero no en relativos ya que el nivel de vida pasó de 3.7 miles de dólares (anuales, PPC a precios de 2017) en 1930, a 20.4 miles de dólares en 2023. No obstante, hubo mayores avances en el resto del mundo.
Destaca que, usando a EUA como referencia de país avanzado, con altos niveles de desarrollo tecnológico y productividad, se observa que en 1930 el PIB per cápita del país era un tercio del de EUA; de entonces a hoy, se ha movido entre 30% y 45% (los niveles mayores a 45% entre 1979 y 1984 fueron una burbuja, que estalló con graves consecuencias). En los años recientes, la proporción del PIB por persona de México respecto al de EUA, es menor al que existía en la década de los 30 del siglo pasado.
“El país tiene un nivel de ingreso medio-alto desde los años 60. En el periodo considerado, México se mantiene siempre por arriba del promedio y mediana del PIB per cápita a nivel internacional. En 1960, de la muestra de 104 países, el nuestro tenía el 30° nivel de vida más elevado (percentil 71). Por su bajo crecimiento fue perdiendo posiciones. Hoy en día, de una muestra de 191 países, es el número 75 (percentil 61).”
Lo anterior se debe a la falta relativa de dinamismo en México que parece enmarcarse en lo que se denomina trampa de crecimiento de los países de ingreso medio. Aunque México y muchos países han mostrado un crecimiento relativamente lento en el citado periodo, es en 2007 cuando se acuña la frase de “trampa de ingreso medio”, aplicable para países con un PIB por persona (en dólares PPC) que supera un cierto umbral.
Pero México tiene una oportunidad en sus manos, de acuerdo con los especialistas y se llama nearshoring que no es un fenómeno pasajero sino de largo plazo y muy positivo para nuestro país, no obstante, por ahora, al evaluar los múltiples aspectos que deben ser enfrentados para tener éxito y escapar de la trampa de ingreso-medio y lo que hemos observado en los últimos años, pareciera que tampoco esta vez ocurrirá.
Destaca que los pronósticos, por definición, son propensos al error y estiman que los pilares del crecimiento en México, que no habían sido sólidos, en los últimos años se han debilitado más, en contraste con la estabilidad macrofinanciera, que se ha mantenido.