El canciller venezolano, Jorge Arreaza, informó esta noche que la embajada de Estados Unidos en Venezuela, retiró todo su personal de ese país suramericano, acatando la decisión del gobierno venezolano que dispuso poner fin a las conversaciones para establecer una oficina de intereses bilaterales en Caracas.
"Informamos que respetando la decisión soberana del presidente Nicolás Maduro y la Convención de Viena sobre Relaciones Diplomáticas, hoy, en el lapso otorgado, la Embajada de EEUU en Venezuela retiró todo su personal estadounidense diplomático, consular y administrativo" escribió el canciller a través de la red social Twitter.
El pasado martes 12 de marzo, Venezuela informó que decidió poner fin a la permanencia de los diplomáticos estadounidenses, "en razón de lo cual en fecha once de marzo de 2019 se ha requerido al gobierno estadounidense la salida del territorio nacional del personal remanente de su antigua embajada en Caracas"
Caracas otorgó entonces un plazo de setenta y dos horas para el retiro de los diplomáticos, lapso de tiempo que fue acatado por Estados Unidos tras cumplir la salida del personal remanente que permanecía en Caracas.
La cancillería explicó mediante un comunicado el pasado martes que la presencia del personal entrañaba "riesgos para la paz, la integridad y la estabilidad del país, tal como ha sido insinuado en numerosas oportunidades por distintos voceros del más alto nivel de la Administración Trump"
El gobierno venezolano ha manifestado en varias oportunidades que se mantiene dispuesto a mantener canales de comunicación y diálogo con el gobierno de los Estados Unidos, al tiempo que sus más altas autoridades han exigido respeto mutuo en la relación bilateral.
Washington ha desconocido desde principios de año al gobierno del presidente Maduro y ha reconocido a un líder opositor que se autoproclamó como "presidente encargado" el pasado 23 de enero.
Horas después de que la administración Trump reconociera al líder opositor autoproclamado, el presidente venezolano Nicolás Maduro decidió romper relaciones políticas y diplomáticas con el gobierno de EEUU.
Caracas ha denunciado que desde la Casa Blanca se dirigen acciones contra la paz de Venezuela que tienen como objetivo el derrocamiento del gobierno venezolano.