El Consejo de Seguridad de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) celebró una reunión a puerta cerrada este miércoles para discutir los últimos hallazgos de la Organización para la Prohibición de Armas Químicas (OPAQ) sobre el uso de armas químicas en Siria.
El informe, elaborado por el organismo de vigilancia respaldado por la ONU, concluyó basándose en su evaluación de la Misión de Investigación de los Hechos (FFM, siglas en inglés) que había "fundamentos razonables de que había sido usado un producto químico tóxico como arma el 7 de abril" durante la batalla para el control de Ghouta Oriental.
Anadió que se había detectado cloro reactivo en muestras sacadas cerca de dos semanas después del incidente.
El último informe de FFM sobre Douma debería compartirse con los estados partes de la Convención sobre las armas químicas y presentarse ante el Consejo de Seguridad.
El documento no se encargó de buscar al responsable por el uso probable del gas de cloro.
Estados Unidos y sus aliados occidentales acusaron al Gobierno sirio de utilizar el gas de cloro durante la última operación militar en Douma al 7 de abril.
El Gobierno sirio ha negado repetidamente las acusaciones, afirmando que los rebeldes estaban inventando todo para atraer la acción militar extranjera hacia Ghouta Oriental, el último bastión rebelde al este de la capital siria.