Ante los altos niveles de riesgo en la liquidez y creciente negociación que enfrenta Pemex por los compromisos de vencimiento, la agencia Moody's anunció una rebaja de la calificación de la petrolera mexicana Pemex a 'Ba3', por lo que la perspectiva se mantiene negativa.
Por: Ernesto Madrid
Sin duda la paraestatal enfrenta altos niveles de vencimientos de deuda debido a la expansión de su capacidad de refinación y producción.
"Moody's considera que esta estrategia generará mayores pérdidas operativas por actividades de refinación en el corto y mediano plazo", dijo la calificadora en un reporte.
Hay que recordar que Pemex perdió el grado de inversión desde abril del año pasado, unos días después de que el gobierno mexicano se negara ante la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) a reducir de manera significativa su producción para evitar una mayor caída en los precios internacionales del crudo.
Por lo que el año pasado, Moody's rebajó la calificación de la compañía en dos escalones desde ‘Baa3’ a ‘Ba2’ y Fitch recortó la nota de la petrolera desde ‘BB’ a ‘BB-’. Así, con dos calificadoras que colocaron a las notas de la petrolera estatal en el grado especulativo, los bonos de la compañía se catalogaron como basura.
Es evidente que la compañía petrolera se ha mantenido en el centro de la política energética del presidente López Obrador, que a pesar de varios señalamientos sobre lo errada que podría estar su estrategia, ha decidido mantener sin cambios los objetivos de la misma.
Pemex arrastra una deuda equivalente a 113,000 millones de dólares, lo que la convierte en la petrolera más endeudada del mundo y ha continuado con una estrategia que ha mantenido a la refinación de crudo, con la refinería Dos Bocas, como su apuesta principal.
Incluso la petrolera también decidió continuar con sus planes a pesar de los cambios derivados de la emergencia sanitaria por Covid-19, que llevó a la mayoría de las empresas del sector a reducir su capacidad de refinación y su producción de crudo.
En tanto Pemex apeló la calificación crediticia que Moody's realizó al señalar falta de transparencia por parte de la calificadora en las métricas que utilizó para determinar la reducción.