La inversión en México ha sido insuficiente para acelerar el crecimiento económico y alentar una creación de empleos más dinámica, señaló hoy domingo el Centro de Estudios Económicos del Sector Privado (CEESP).
En su reporte semanal, el CEESP, organismo del Consejo Coordinador Empresarial (CCE), dijo que la baja inversión limita que las empresas generen un mayor número de puestos de trabajo, además de que la menor demanda laboral ha llevado a la disminución de los salarios.
"Es claro que el principal motor del crecimiento no está funcionando como debiera, ya que los niveles de inversión en México no han sido los suficientes para lograr que el ritmo de crecimiento de la economía sea mayor al 2,4 por ciento promedio en los últimos 25 años", señaló.
"La generación de empleos es importante, pero es deseable que sean de calidad, con mejores salarios y prestaciones sociales", agregó el organismo.
De acuerdo con datos del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), el total de trabajadores afiliados en el primer trimestre del año fue de 269.143, un 27 por ciento menos que el mismo lapso del año pasado.
De esta manera, en los últimos 12 meses a marzo, el registro laboral en el IMSS sumó a 561.511 nuevos empleados, un 29,2 por ciento menos que el periodo comparable anterior.
El CEESP dijo que el menor ritmo de crecimiento de los trabajadores al IMSS genera preocupación, ya que refleja una desaceleración de la actividad económica del país.
"Por otro lado, puede ser un indicio del agotamiento del proceso de formalización", agregó.
"El principal motor del crecimiento es la inversión, y al incrementarse el acervo de capital se pueden crear actividades más productivas, capaces de generar más empleos de calidad y mejorar el bienestar de la población", reconoció el CEESP.
El gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador, que inició el pasado 1 de diciembre, se ha propuesto alcanzar tasas de crecimiento económico del 4 por ciento mediante el combate a la corrupción, para después destinar los recursos recuperados a proyectos productivos.
En 2018, la economía mexicana creció un 2 por ciento.
México, la segunda mayor economía de América Latina después de Brasil, depende de los ciclos económicos de Estados Unidos, su principal socio de negocios.