México debe corregir sus problemas estructurales e institucionales que han impedido a la economía crecer más e incluso han desincentivado la inversión, exhortó el jueves el central Banco de México (Banxico).
En la presentación del "Reporte sobre las economías regionales", el director general de investigación económica de Banxico, Daniel Chiquiar, dijo que eso ayudaría a acortar las diferencias de desarrollo entre los estados del país.
"Para alcanzar estos objetivos, se debe revisar el diseño institucional de incentivos, de modo que se privilegie la creación de valor, se impulse la adopción de tecnologías de punta, se mantenga la apertura comercial y de flujos de inversión y se fomente la competencia económica", dijo el directivo.
"Asimismo, es necesario adoptar políticas que combatan la inseguridad, la corrupción y la impunidad, y que garanticen la certeza jurídica y el respeto a la propiedad privada en todas las regiones", agregó.
Chiquiar señaló que al mejorar la eficiencia con la que opera la economía y fomentar el estado de derecho, las regiones del país estarán en mejores condiciones para hacer frente a los diversos retos que surjan y proveer una mayor calidad de vida para su población.
El reporte de Banxico señaló que la actividad económica en México mostró una importante desaceleración en el cuarto trimestre de 2018, la cual podría prolongarse hacia inicios de 2019.
Las exportaciones manufactureras, que van en una mayoría a Estados Unidos, mostraron "cierto estancamiento", en tanto que se acentuó la trayectoria negativa que la inversión fija bruta ha venido presentando desde inicios de 2018, indicó.
Además, "se apreció cierta pérdida de dinamismo del consumo privado", indicó el documento.
En el panorama regional, Banxico dijo que el sur, la zona que concentra a los estados más empobrecidos del país, observó una contracción en la actividad económica.
Por otro lado, las industriales zonas norte y centro exhibieron un estancamiento como resultado de la desaceleración de la economía global, una mayor debilidad de diversos componentes de la demanda interna, y algunos factores de carácter transitorio.
De acuerdo con las cifras oficiales más recientes, la economía mexicana creció un 1,7 por ciento en el cuarto trimestre de 2018, una dinamismo menor que el de los dos trimestres previos cuando superó los niveles del 2,0 por ciento.
México, la segunda mayor economía de América Latina después de Brasil, se expandió un 2,0 por ciento en el 2018, desde el 2.1 por ciento del año anterior.
En las últimas semanas, varios organismos e instituciones recortaron sus expectativas para el crecimiento de México debido a la incertidumbre externa e interna.
Según estimaciones del nuevo gobierno mexicano, que comenzó funciones el pasado 1 de diciembre, la economía local podría crecer entre 1,5 y 2,5 por ciento en el 2019.
