Una iniciativa inédita en la Secretaría de Cultura es el Programa Nacional Cultura Comunitaria, ya que pone énfasis en fomentar la participación en la cultura y que las personas no solo sean audiencias, sino agentes culturales.
Esther Hernández Torres, directora general de Vinculación Cultural, instancia encargada de implementar este programa, indicó que arrancará en 720 municipios para promover el ejercicio efectivo de los derechos culturales de personas, grupos y comunidades en contextos y condiciones de vulnerabilidad social. El programa se implementará en colaboración con más de 450 becarios del Programa Jóvenes Construyendo el Futuro.
Con el Programa Nacional Cultura Comunitaria se busca conformar una cultura para la paz y la convivencia, la transformación social, el desarrollo cultural comunitario y el fortalecimiento de capacidades locales, por lo que se trabajará con poblaciones históricamente discriminadas, además de personas en situación de reclusión y movilidad.
Para la selección de los primeros 720 municipios, explicó Hernández en entrevista, se hizo un cruce entre índices de pobreza y violencia y se tomaron en cuenta problemáticas sociales específicas, como suicidios adolescentes, trata de personas y alerta de género, entre otras.
Cultura Comunitaria tendrá cuatro ejes de acción: Misiones por la diversidad cultural, Territorios de paz, Semilleros creativos y Comunidades creativas y transformación social, con los cuales se busca poner en juego diversas posibilidades para el impulso de comunidades creativas que transformen sus entornos sociales.
Esther Hernández detalló que Misiones por la diversidad cultural es una política de reconocimiento de las culturas locales que tiene contemplado el mapeo de las necesidades culturales de los municipios, a través de un diagnóstico participativo y el registro de agentes culturales individuales y colectivos, creadores, prácticas culturales y artísticas e infraestructura, para conocer las condiciones de cada municipio en materia cultural.
Además, tendrá un programa artístico con la participación de creadores locales, quienes se presentarán en diálogo con artistas de sus respectivos estados y compañías nacionales en actividades que se realizarán los fines de semana con el objetivo de reconocer y mostrar la riqueza cultural del lugar.
Para este propósito se capacitará a más de 500 promotores culturales en todo el país, quienes se integrarán a los equipos regionales y estatales de Misiones por la Diversidad Cultural, contratando a más de 2,500 artistas y más de 2,700 talleristas para la realización de jornadas culturales en 451 municipios.
Territorios de paz es una línea de acción ligada a la infraestructura cultural y social que muchas veces está subutilizada, por lo que se buscará un modelo de gestión para fortalecer las capacidades locales, los derechos culturales y la programación artística en cada uno de los espacios, a través de nuevos puentes entre la comunidad y las instituciones.
Este eje pondrá en marcha un proceso de construcción colectiva de 50 espacios públicos en todo el país dedicados a la innovación cultural comunitaria. Brindará capacitación integral a más de 500 personas dedicadas a la gestión cultural comunitaria, quienes desarrollarán proyectos culturales innovadores en sus territorios, impulsando de inicio el desarrollo de 32 proyectos comunitarios estratégicos.
El tercer eje es Semilleros creativos, el cual implica acciones de creación colectiva con niñas, niños y jóvenes, retomando experiencias previas, como las agrupaciones musicales comunitarias del Sistema Nacional de Fomento Musical y los colectivos comunitarios de creación artística que se implementaron en la Dirección General de Culturas Populares, Indígenas y Urbanas.
Para la atención de la infancia se trabajará con el programa Alas y Raíces, con el objetivo de promover que este sector sea un agente cultural a través del desarrollo de la imaginación y la libertad creativa en espacios de encuentro y respeto.
Semilleros creativos trabajará 3 horas al día con 17,000 niñas, niños y jóvenes a través de 300 semilleros permanentes en artes visuales, artes escénicas, audiovisual, fotografía, música y radio comunitaria. Para ello se contratarán a 900 artistas y maestros que activarán procesos de educación artística y de participación comunitaria, capacitados en protección de infancias y entornos seguros.
Finalmente, Comunidades creativas y transformación social, la cuarta línea de acción, buscará una vinculación estrecha con artistas, tanto del Fondo Nacional para la Cultura y las Artes (Fonca), como del Programa de Estímulo a la Creación y Desarrollo Artístico (PECDA).
Los artistas serán corresponsables con los proyectos comunitarios para generar prácticas artísticas colaborativas a manera de tequios que propicien la interacción entre creadores y comunidades. En este rubro, más de mil artistas del Programa de Interacción cultural del Fonca participarán activamente en los programas estatales de los municipios prioritarios.
Para el arranque del programa, Esther Hernández anunció que en los próximos días se lanzarán dos convocatorias que estarán abiertas durante un mes, para integrar a maestros en los Semilleros creativos y los equipos de las Misiones por la diversidad cultural.
A través de la página culturacomunitaria.gob.mx, los interesados podrán registrarse en línea. Maestros y artistas locales recibirán formación didáctica y en trabajo comunitario para formar parte de Semilleros creativos, mientras que creadores y gestores podrán registrarse para participar en las Misiones por la diversidad.
A principios de marzo comenzará a operar el Programa Nacional Cultura Comunitaria de manera paulatina en municipios con gobiernos estatales y municipales con inversión federal, a cargo de la Secretaría de Cultura, y apoyo en especie, como sedes y gestión por parte de los gobiernos estatales y locales.
Esther Hernández destacó que se trata de un programa inédito en la Secretaría de Cultura que operará a nivel territorial directamente en los municipios de manera permanente a fin de reconocer las expresiones locales y utilizar el poder del arte y la cultura para la transformación social.