*Un estudio hecho en Finlandia reveló incremento de los riesgos de complicaciones físicas y psicológicas para las mujeres que abortan.
*Las conclusiones de la investigación arrojaron un aumento de 3.5 veces en el riesgo de suicidio o accidentes mortales en mujeres que acaban con su embarazo.
Un estudio médico relacionado a las causas de mortalidad materna reveló que el riesgo de morir dentro del año posterior a un aborto por complicaciones médicas o por suicidio es varias veces más alto, y es menor la posibilidad de perder la vida después de un aborto espontáneo o del parto.
Ernesto Madrid
Con datos precisos y un seguimiento especializado de casos concretos, la Unidad de Análisis Estadísticos del Centro Nacional de Investigación y Desarrollo para el Bienestar y la Salud de Finlandia (STAKES), concluyó también que acabar con la vida de una o un bebé por nacer no es la principal causa de mortalidad materna.
La organización Dales Voz consideró urgente que los diputados del Congreso del Estado de México @Legislmex conozcan y sean sensibles a esta información, basada en evidencia, para que conozcan los riesgos de la despenalización del aborto en la entidad y el efecto adverso a la salud y la seguridad de las mujeres que abortan.
Conforme a los hallazgos realizados para evaluar e interpretar con exactitud los reportes de muerte materna, los investigadores extrajeron los registros de los certificados de defunción de todas las mujeres en edad reproductiva (15‐49 años) que murieron entre 1987 y 1994, un total de 9,192 mujeres.
De acuerdo con la metodología aplicada, posteriormente los especialistas rebuscaron en la base de datos nacional de atención a la salud, identificaron cualquier evento relacionado con el embarazo para cada una de estas mujeres en los 12 meses previos a sus muertes.
Se encontró evidencia de que el riesgo de muerte por suicidio aumentó al menos después de los doce meses de que la mujer cometió un aborto, mientras otras mujeres padecieron las secuelas que deja un aborto.
El análisis estadístico y los datos públicos en esas fechas estableció que, en comparación con las mujeres que lo llevan a término, las mujeres que abortan son 3.5 veces más propensas a morir dentro del año siguiente.
Debido a las altas tasas de suicidio y homicidio registrados en el periodo de análisis, se observó un mayor riesgo para las mujeres después de los abortos, especialmente en el grupo de edad de 15 a 24 años.
Una conclusión determinante es que la baja de tasa de muertes por causas externas sugiere el efecto protector del parto; pero el elevado riesgo después de un embarazo interrumpido debe ser reconocido en la provisión de servicios de salud y sociales.
En otro dato, conforme a las cifras obtenidas de esta investigación, quedó demostrado que el riesgo por accidente fatal aumentó cuatro veces más en mujeres que abortaron al menos un año antes, frente a las mujeres que determinaron llevar su embarazo hasta el nacimiento de su bebé.
TENDENCIAS SUICIDAS
También, el reporte del Centro Nacional de Investigación y Desarrollo para el Bienestar y la Salud de Finlandia arrojó que la incidencia de homicidios aumentó entre mujeres, siendo, en su mayoría, mujeres que habían perpetrado un aborto. En otras palabras, las mujeres que tuvieron un aborto perdieron su temperamento y fueron más propensas a la ira en determinada circunstancia.
Además, conforme a este estudio hecho en Finlandia, muchas mujeres que no eran previamente autodestructivas se convirtieron en ello como resultado directo de la traumática experiencia del aborto.
En cambio, se determinó que el sistema educativo y la maternidad tienen efectos protectores en adolescentes embarazadas; y que el apoyo psicológico y social previene los suicidios que se dan en algunos casos después de un aborto.
A manera de conclusión el Centro Nacional de Investigación y Desarrollo para el Bienestar y la Salud, estableció que el aborto como política pública no es una auténtica solución al problema de un embarazo no planeado, como tampoco para incidir en una baja de la mortandad materna.
También los investigadores consideraron que la decisión de algunas mujeres que abortan no sopesa las consecuencias médicas y psicológicas que enfrentarán.