La Secretaría de Salud y el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) firmaron un convenio de colaboración en materia de transferencia de recursos presupuestarios federales, con el carácter de subsidios, para garantizar el acceso y continuidad en la prestación de servicios de salud con calidad a la población en condiciones de vulnerabilidad y sin seguridad social, sobre todo en regiones, municipios y localidades con bajo índice de desarrollo humano y de alta o muy alta marginación.
El convenio fue signado por la subsecretaria de Integración y Desarrollo del Sector Salud, Asa Christina Laurell, y el director general del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), Zoé Robledo Aburto, así como el director general de Planeación y Desarrollo en Salud, Alejandro Manuel Vargas García y la titular de la Unidad del Programa IMSS-Bienestar, Gisela Lara Saldaña.
En su intervención, la subsecretaria de Integración y Desarrollo del Sector Salud señaló que este convenio establece la transferencia de 6 mil 500 millones de pesos del Presupuesto de Egresos de la Federación (PEF) a las 32 entidades federativas, más la colaboración de las clínicas IMSS-Bienestar ubicadas en las comunidades rurales de difícil acceso.
Se trabajará en tres líneas de acción, detalló, la primera será dignificar las unidades médicas de atención del primer nivel de las comunidades con alto y muy alto grado de marginación, particularmente de pueblos indígenas; la segunda, garantizar personal médico y de enfermería para la prestación del servicio, y la tercera, el abasto de medicamentos.
Por último, informó que a partir de la próxima semana se firmarán los convenios correspondientes con las 32 entidades federativas para la transferencia de los recursos. Los primeros estados serán: Chiapas, Guerrero y Oaxaca, debido a que registran los grados más altos de marginación y vulnerabilidad en materia de atención médica.