Irregularidades por 785 millones de pesos en el Tren Maya y pagos excesivos y sin aclarar en el Tren Interurbano México-Toluca, por 238 millones pesos, encontró la Auditoria Superior de la Federación (ASF) en una parada más, de presuntos actos de corrupción.
Ernesto Madrid
De acuerdo con la revisión presentada en 12 análisis a propósito del presupuesto de 2022 de uno más, de los proyectos insignia del presidente Andrés Manuel López Obrador, los informes de la Auditoría indican que se detectaron pagos indebidos por 256 millones de pesos por concepto de bienes distintos a la tierra, ya que se realizaron sin contar con avalúos individuales con los que se comprobara que elementos se pagaron y como se determinaron las cantidades de cada uno de ellos.
Además, el Gobierno de México adquirió terrenos equivalentes a 295 mil metros cuadrados en el tramo 6, encargado al Ejército, que no ocupará para la construcción del proyecto ferroviario en el sureste del país y en el tramo 5, además, se detectó la falta de “acreditación de la garantía correspondiente a 14.4% por la ampliación del anticipo del Subtramo 1.
Aunado a lo anterior, tampoco se acreditó la utilización de los anticipos otorgados conforme a los programas de utilización de los contratos plurianuales de obra de los subtramos 1, 2 y 3 del Tramo 5 Sur del Tren Maya”, de acuerdo con la revisión a los gastos realizado por la Defensa Nacional.
Además, otras auditorías realizadas, se encontró que en los tramos 5 Sur, 6 y 7 se realizaron pagos en exceso por 11.8 millones de pesos debido a que no se realizaron los ajustes a las matrices de siete precios unitarios de concurso, descontando el personal directivo y operativo de los tramos derivado de la cancelación de los servicios de dichos tramos, en un contrato de servicios relacionados con la obra pública.
¿Y EL INTERURBANO?
El proyecto del Tren Interurbano México-Toluca tiene por aclarar un monto de 238 millones 377 mil 93 pesos, de acuerdo con tres revisiones realizadas al proyecto ferroviario por la Auditoría Superior de la Federación (ASF) correspondientes a la Cuenta Pública 2022 a cargo del gobierno federal.
La Auditoría encontró pagos en exceso por más de 30 millones de pesos en la supervisión de la construcción del tramo denominado “Zinacantepec”, en el cual no se realizaron presumiblemente las tareas de seguimiento de edificación en dónde tampoco se acreditó la participación del personal indicado en la matriz de cada precio en siete conceptos no previstos relacionados con la construcción de dicho tren.
La ASF dictaminó que se realizaron pagos indebidos por 11.7 millones de pesos por trabajos de mala calidad, en seis conceptos de trabajo relacionados con la construcción de 12 pilas de cimentación de 1.50 metros de diámetro para el apoyo “P-5″ en la construcción del puente atirantado.
En lo que respecta al material rodante, la ASF encontró la falta de elaboración de la bitácora electrónica o convencional de los trabajos del contrato, que carecen de las firmas del residente, de la contratista y de la supervisión externa y no reúnen los requisitos establecidos por la normativa.
Entero lo delicado del caso es que en los transformadores no se cumplió con el resguardo como se indicó en las especificaciones particulares del contrato, “ya que se encuentran a la intemperie y presentan oxidación y deterioro en algunos de sus componentes”.