Respecto al reportaje publicado con título Contubernio ISSSTE- OLYMPUS en el que se hace referencia a que se piensa cambiar el actual esquema de contratación que permitía una revisión para pago posterior a la prestación del servicio, por un nuevo esquema que se tiene que pagar por adelantado y con un gasto muy superior al que actualmente se eroga, se manifestó lo siguiente:
En los últimos años el Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores (ISSSTE) ha erogado por servicios integrales de endoscopia a nivel nacional una cantidad de alrededor de doscientos millones de pesos anuales antes del I.V.A. esto incluye todos los accesorios, todos los equipos su funcionamiento al cien por ciento libre de retrasos por reparaciones y sobre todo resolviendo las necesidades de los pacientes en sus primeras etapas, en este esquema el cobro del servicio mencionado se hace una vez que dicho servicio fue prestado y verificado por varias áreas de los hospitales en cuestión, verificado por las áreas administrativas y finalmente pagado a los prestadores de servicios en alrededor de sesenta días posteriores a la ejecución.
Lo anterior no solo le brinda al instituto procedimientos libres de problemas o fallas por suministros sino que permite una verificación completa mucho antes de efectuar el pago, además de que operativamente no se consumen todo el presupuesto asignado a este servicio que es de alrededor de 460 millones anuales antes del I.V.A. como se puede constatar en el contrato de adjudicación de marzo 2021 AA-051GYN005-E181-2021 el cual se puede consultar en la página de Compranet https://compranet.hacienda.gob.mx/esop/guest/go/opportunity/detail?opportunityId=2120830.
Casualmente el contrato de adjudicación del 2022 no está disponible para su consulta en el portal ya mencionado.
Actualmente se busca eliminar al intermediario que vigila que las operaciones se hagan de la mejor manera posible, en el menor tiempo posible y a la mayor cantidad de derechohabientes que sea posible, pues de eso depende su ganancia, es decir, al eliminar a este vigilante dicha ejecución se pone en manos de toda la infraestructura del ISSSTE con su conocida y evidenciada negligencia, así como sus corruptelas.
Lo anterior sería perfecto que el instituto se ocupe de lo suyo, si esto no implicara lo que se pretende hacer ahora y que es la adquisición directa de los equipos que serán obsoletos en pocos años por un valor que rondara cerca de los mil millones de pesos y los accesorios, periféricos, aparatos extras e insumos en demasía que ahora han sumado al nuevo estudio de mercado para generar la requisición de compra y estarán muy por arriba del valor mencionado de los equipos, un cálculo básico nos lleva a alrededor de mil quinientos millones es decir, gastarán por adelantado un total de alrededor de dos mil quinientos millones de pesos solamente para terminar el actual sexenio implicando esto un gasto excedente más de cinco veces el valor que históricamente han venido pagando y sin la posibilidad de que exista una supervisión y ajuste sobre el presupuesto erogado, puesto que será una adquisición ya pagada.
Lo que llama la atención es que alguien debe estar recibiendo una gran cantidad de dinero para que esto suceda, es decir la corrupción, al más puro estilo del antiguo PRI, en donde están involucrados el ISSSTE, la marca OLYMPUS, la marca BOSTON SCIENTIFIC, el director de la institución Pedro Zenteno, así como Sebastián Latapí de la empresa que representa estas marcas, todo esto jugando a la especulación con el dinero de los mexicanos.